lunes, 23 de abril de 2007

Collares de días


He estado leyendo reseñas de un libro de Crista Wolf que se titula “Un día del año” y que recoge las anotaciones hechas todos los años el 27 de septiembre, me gusta la idea.

Para eso son los tiempos circulares y las celebraciones, para enhebrar la memoria del mismo día y poder luego comparar las cuentas.

De entre todas las que yo he encontrado para ensartar hoy en el hilo del día del libro hay una del año 91 o el 92, cuando me llamaron de un programa de radio, el de Javier Sarda, porque querían entrevistarme, me habían concedido un prestigioso título, el de librera arruinada. (Luego la entrevista me pareció un desastre, en la previa, entre dos mil preguntas igual de intrascendentes, una era: “¿qué libro le recomendarías a Felipe González?”, yo respondí que uno de Adorno, creí que se sobrentendía, de Teodoro Adorno, pero lo metieron en la cabecera como un chiste fácil y me sentí fatal). El resto del día no estuvo nada mal, comimos en el campo, carne asada, y por la tarde fuimos a los toros. El título aun lo considero el mejor de los pocos que he adquirido.

Las manzanas, el ojo y este flagelo son de Michel Batory