lunes, 24 de noviembre de 2008

¿Entonces?


La noticia de divulgación científica que más me ha impactado es que uno se puede quedar ronco de pensar. Parece que el pensamiento activa las cuerdas vocales aunque no pronuncies ni una sílaba. 

Hay conocimientos que mejor no tenerlos. De no saber eso no me preguntaría durante un segundo de angustía si tengo voz cuando llaman a la puerta o suena el teléfono.

He cambiado de lámpara.  Si supiera darle la debida importancia a este cambio de luz no me quedaría ronca.  Además tengo buenos consejeros. Mi padre me dijo ayer, mientras me explicaba otra vez la crisis:

-Marta no pienses en nadie, ni siquiera en tí misma.


Robert Y Shana Parkeharrison