domingo, 24 de mayo de 2015

Cómo no, las elecciones.






Las primeras urnas que recuerdo son de cuando tenía trece años, nos pusimos los de mi clase a vender lo que habíamos hecho en esa asignatura impronunciable, “pretecnología”, para el viaje de estudios. Entonces llegó un señor que nos lo quería comprar todo a buen precio para que desaparecieramos de allí.. Desde bien tempranito estuvimos viendo a Arturo Beltran, que era candidato, intentando persuadir, pero el fragmento que tengo grabado es la llegada de mi abuelo, que ante las insitencias contestó:

-Pa chicos está la siega.

Me cogió de la mano, me llevo a una cabina  y me enseño su voto en secreto y orgulloso. Era para el PT, el Partido de los Trabajadores.

Hoy son las primeras elecciones sin mi madre y la presencia de su ausencia me acompaña aún más. No reconocería a mi padre, que ha recogido con fuerza su testigo, ayer lo pillé diciéndo por teléfono.

-Estoy tan, tan, tan a la izquierda, Eli, que me voy a caer

Ojalá esta noche nos tomemos un ron por la Arsenia, otro por la Manuela, otro por la Colau, otro por Rosa., otro por el Echenique...mucho ron va a ser...con un trago largo por todos suficiente.

P.d La foto: No me gustan nada esos tenderetes entre un confesionario y un probador de boutique, nunca he entendido que uno se esconda para votar. En todo caso esta noche vamos a conocernos mejor, pase lo que pase.