lunes, 22 de octubre de 2012

Si pudiera elegir, escribiría...




Hoy, como tantos días, le tocaba ayudarme a pensar al camarada Escarpa:

Si pudiera elegir, escribiría...

Si pudiera elegir, escribiría
sobre las alas lentas del verano,
sobre ese caramelo escogido entre muchos
y su sabor poliédrico, 
la belleza torcida, las prescripciones médicas,
los gatos, el placer, el mar, la noche.
Resulta tan difícil creer en estas cosas.
A veces nos parece que es otro el que contempla
los milagros de lejos, subido a una cornisa,
que es otro siempre el que despierta a tiempo,
y el sol en la ventana nos recuerda de pronto
que la luz es posible.
*
Yo no comprendo nada. No por eso
me rindo. Una cuestión
de técnica, sin más. No comprender
apenas nada ofrece
nuevas y limpias posibilidades.
Ir ofreciendo el desconocimiento, hacerle
entrega al mundo de este interrogante,
que sea finalmente de todos tanta duda,
tanta perplejidad.
No comprendo siquiera
por qué, pero es inútil
tratar de resistirse a ese sosiego
que provoca partir
el pan del estupor
y, al repartirlo,
propagarlo, darlo
a luz, iniciarlo,
no poseer la sola
incomprensión de todos,
y no comprender nada,
y celebrarlo.
*
No hablaré de la muerte
porque no la conozco,
y cuando la conozca
no hablaré de la muerte
ni de nada. Ahora
es tiempo de vivir,
sencillamente. Luego
vendrá la muerte. O no. 
Quién sabe. Ya veremos.