domingo, 3 de julio de 2011

He girado la ruedita de mis hábitos


Este año jazz en la costa en lugar de pirineos sur.

Si me propusieran que soñara mi lugar en el mundo le pondría una yuca gigante, una casa que hubiera tenido más vidas, árboles frutales y un huerto. Y me conformaría aunque no tuviera riachuelos y cascadas, aunque no hubiera chimeneas, aunque no se viera el mar, aunque las frutas no fueran tropicales, aunque no se viera tan bien el cielo. Y aunque no hubiera en el mes de julio un festival de jazz estupendo al lado.

Entrada de la reiterativa serie: ¡Oh, Molino! que a partir de ahora voy a etiquetar para autocontrolarme.