martes, 23 de marzo de 2010

Los tangos de la pimienta


La canción es una de las que me ha mandado mi padre a mitad de mañana, que ahora chateamos, y me ha recordado donde me enganché al flamenco exactamente. Había un pellizco en la versión del disco, cuando decía la Lole lo de la calle la pimienta, que aquí no es tanto, pero aún así. Y ahí fue.

El otro día escuché en el coche, sólo escucho en el coche parece, que hay un método para pasar las cintas de cassette a CD, a buenas horas, ahora ya están por aquí todos: Marchena, la Paquera, Manolo Caracol y los que de aquellos lejanos viernes, incluida La Juana la del Revuelo, que uno de esos miles de viernes se remangó con ganas en el altar de la iglesia del hospital provincial y me dejó allí .

Y parecía que se había hundido el mundo sin esas cintas, pero no. Qué va.


2 comentarios:

Jesús Alonso dijo...

No sabía yo que compartíamos afición porvel flamenco. La mía empezó tardía pero con ganas. Habrá que intercambiar pareceres y gustos.

Marta Sanuy dijo...

Ni yo sabía, lo que hay que hacer es pedirle posada al Muelas en Julio, ¡qué tengo unas ganas de ir a Cartagena cuando es!