Molly Taylor
Se le pasaba la vida en
felicitarse.
Escribo. Podría
estar mejor escrito pero ahí lo dejo. Luego me pregunto cuantos de mis conocidos
se podrían dar por aludidos con esa frase. Me parece un asunto tan enjundioso
que dejo de escribir. Se me va el santo al cielo, me pongo a hacer otras cosas. Pero cuando vuelvo a sentarme sale otra frase disparada:
Y tanto se disfrazaba que por mucho que lo desnudásemos sólo
lo veíamos a él.
Hay
que andar con mil ojos y doscientas mil orejas.
Por qué dicen “cambios en profundidad” y no “cambios
profundos”. Todo plagado de venenosos matices.
Dale, me enseñas tu
mundo y luego te enseño yo el mío.
Me he vuelto a acordar de que se va a ir Carluchi porque he
leído en fb que también se va Paula, una amiga chilena, y me he puesto a pensar
en los largos plazos y en los buenos pactos. Ni modo, bien que mal cumplimos.
Veinte años, entre unas cosas y otras, nos costó la vuelta.
Es un lujo tener una doble vida. Le digo para animarlo. Y un
segundo después me doy cuenta de que además de decirlo lo creo. ¡Qué mejor que
otro tú, a quien has prestado mucha atención durante todos estos años desde
aquí, te esté esperando allí! ¡Quién os viese saludaros!
El ph nómada-sedentario.
Debería existir un medidor que nos pusiera de colores
dependiendo de nuestra relación con el espacio y el tiempo.
Yo me pediría ser ph7, para poder mirar a los dos lados.
1 comentario:
Martaaaa!!te dejé un comment de respuesta en mi blog ;) pero por si acaso este es el mail...
satsuma890@hotmail.com
abrazos!!
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