viernes, 22 de mayo de 2015

El oso abrillantado y la mara Salarrue, mi mara.


No conozco a Neto porque era el ausente, pero convivir con  los que lo extrañaban tanto y con tanta poesía hizo que le fuera pillando afecto. Ahora chateamos de vez en cuando, pasamos juntos los nervios de los recuentos de votos en el paísito y, a veces, hacemos planes para volver de una a El Salvador. Qué sueño reunir al Tibu, a Vladi, a Manuel y a Neto alrededor de unas conchas, recién aterrizada, en el puerto de La Libertad, por ejemplo.

Mientras hago tiempo, tardará, me llegan desde Minnesota Osos Abrillantados.



Medialuz






He soñado una fuga. Y he soñado
tus encajes dispersos en la alcoba.
A lo largo de un muelle, alguna madre;
y sus quince años dando el seno a una hora.

He soñado una fuga. Un para siempre
suspirado en la escala de una proa;
he soñado una madre;
unas frescas matitas de verdura,
y el ajuar constelado de una aurora.

A lo largo de un muelle...
Y a lo largo de un cuello que se ahoga!

Cesar Vallejo


 La foto es un mejunje de estos días ente filtros y herbarios.