Nils Udo
Casi todos los problemas lo son porque se trastoca el tiempo o el espacio. Lo del tiempo intenté simplificarlo abajo. Lo del espacio me sirve como pauta vital, y sin embargo no lo cuento nunca.
Creo que las relaciones se estropean cuando la distancia es
mayor o menor de lo que procede. Como es una distancia que va cambiando la que
se produce entre humanos, hay que estar siempre atentos, para que acercamientos y alejamientos se conviertan en una danza y no deriven en malos entendidos, sobre todo para que no provoquen la inflación del ego o problemas de autoestima.
Lo ideal sería poder aplicar una fórmula matemática y que
la distancia fuera la que quiere el otro sumada a la que quieres tú y dividida entre dos. Pero lo emocional no marcha así, impone un funcionamiento elástico, complejo y desconcertante. Sin embargo no tiro nunca la toalla, creo que hay que seguir aspirando a la
distancia correcta en cada caso. Con la persona a la que amas o con tu vecina. Y
hablo de un espacio metafórico y diáfano. Donde reinara la comunicación, que es
atención, pero también claridad.
10 comentarios:
Eres sabia, Sanuy.
Lo voy pensando...
¡qué piropazo, Berdor! Y viniendo de ti vale cienmil veces más. Merci. Me voy pa Huesca.
A ver si tengo un poco de razón y te resulta útil Manuelle.
besicos a las dos.
Sabia con poética, estoy con Madame Ester... :-)
merci, merci, merci beaucoup, Madame Tatiana.
¡dos notas parisinas en una entrada! Creo que estoy triunfando en Francia.
Bravísima Martina!!!!
Besos mil!
gracias y achuchón gordo para ti Joaquina.
¡Qué bueno! Aunque no creo que las fórmulas matemáticas sirvan para las relaciones humanas... Un abrazo
¡Hola Paula! tengo ganitas de verte, las matemáticas no creas, que dan mucho más de si de lo que creemos. Pero no, entre homínidos, de momento, intuición y conocimiento es lo que funciona
gracias
besicos para ti y para tus chicas.
Menuda pasada.
Publicar un comentario